Con la ayuda de este robot, se pudo controlar el fuego y contribuir a culminar con el siniestro

Entre los bomberos que lucharon para combatir el incendio del lunes en la Catedral de Notre Dame, se encontraba “Colossus”, un robot no tripulado, con un poderoso cañón de agua y manipulado a control remoto, que fue quien asumió el riesgo de salvar la iglesia cuando, luego de más de 9 horas de propagarse las llamas en la catedral parisina, la situación se volvió peligrosa para el ser humano.

Este fue diseñado por la compañía francesa Shark Robotics, y entró a la acción conectado a una potente manguera, tratando de evitar que las llamas siguieran propagandose.

De acuerdo con el fabricante, este robot puede extinguir incendios, transportar heridos, realizar resúmenes de información y hacer reconocimiento óptico mediante una cámara de 360 grados, misma que funciona de día y noche.

Por: QS Redacción.

Con información de: ADN 40.