Qué tal, en esta ocasión decidimos escribir un poco respecto al ciclismo de montaña y en especial sobre la realidad de México rumbo al Campeonato Panamericano de esta disciplina que se realizará en Aguascalientes y que, sin duda, es un gran marco para que los atletas nacionales demuestren su entereza en este certamen deportivo, aunque me parece que las limitantes para dominar el medallero, continuarán.
Este martes, la Federación Mexicana de Ciclismo dio a conocer los nombres de los mexicanos que obtuvieron su boleto para representar al país en el certamen panamericano del 2 al 6 de abril, donde destacan las cartas más fuertes en la categoría Elite, Gerardo Ulloa y Daniela Campuzano.
Sin duda, los ciclistas antes mencionados son favoritos para ganar la presea de oro en sus respectiva categoría y rama, pero lamentablemente no va alcanzar para que México logre el primer lugar en el medallero del evento, pues países como Colombia tienen mayor nivel competitivo de manera general, que no es el caso de México y a eso me refiero cuando hablaba de limitantes u obstáculos.
¿Por qué Ulloa y Campuzano son favoritos?, simplemente por el tipo de preparación que han llevado durante su carrera deportiva, aunado a la experiencia que han obtenido. Ambos han tenido la oportunidad de viajar por el mundo compitiendo en eventos como los circuitos de ciclismo de montaña en Estados Unidos o República Checa, además de Copas del Mundo y Campeonatos Mundiales, lo que les ha dado un panorama distinto al que tienen los ciclistas nacionales pero la gran diferencia es el recurso e inversión económica de sus familias, patrocinadores y en menor medida, gobierno, lo que ha hecho la gran diferencia.
Y es que, si bien este deporte es muy practicado en México, casi en todos los estados y municipios de la República Mexicana, la realidad es que, en la mayoría de los casos, se hace de manera recreativa, pues ser competitivo para estar al nivel de países como Estados Unidos, Canadá, Brasil o Colombia, es muy muy difícil y no precisamente porque haya ausencia de talento, sino que el talento que hay no se explota en nuestro país.
Así es que me parece que durante el Panamericano en Aguascalientes, podemos esperar el oro de Ulloa y Campuzano en la Elite, una que otra sorpresa en el resto de categorías, pero no que México sea el mandamás del medallero, aún falta que más representantes de la iniciativa privada, los gobiernos estatales y la Conade, decidan apoyar en mejor medida a los equipos de ciclismo de montaña del país, que inviertan “más pesos” en ello… cuando eso suceda, creo que nuestro país podrá competir para liderar el contabilizador de preseas y buscar un papel destacado en Juegos Olímpicos.
El claro ejemplo es el equipo CONADE- Code Guanajuato- Cadencia.mx que tiene a Ulloa en un alto nivel competitivo y con grandes posibilidades de llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, como en Sídney 2000 lo consiguió el mexicano Ziranda Madrigal, primer mexicano en asistir a una justa de esta índole en el ciclismo de montaña.
La realidad es que no todos, por mucho talento y ganas de trascender tenga
n, pueden competir en el extranjero o desembolsar entre 70 mil y 110 mil pesos que cuesta una bicicleta, además de contar con una de ruta y otra de montaña, una con suspensión delantera y otra con doble suspensión… sencillo no es.
Me despido de ustedes y esperemos que los representantes aztecas aprovechen el hándicap que se presenta en esta edición 2019, me refiero a correr en territorio azteca, donde podrán tener mayor acceso a la pista y el apoyo de la afición; ¡estemos atentos!.
Por Roberto Ramos